mis noches de wong kar

me acuerdo de la película my blueberry nights, la que seguramente sea la peor de wong kar wai (de quién, admito hoy y desde hace muchos años ya, me reconozco fan, cosa difícil en mí porque, como saben los que me conocen, me cuesta ese rubro, el del fanatismo). cuestión que hay una escena en la que jud law le explica a norah jones que el frasco que tiene ahí, sobre la barra del bar que administra, son todas las llaves que las personas le dejan o se olvidan (como así hizo la protagonista muy al comienzo, luego de su ruptura amorosa). y que él, que no es quién para tirarlas porque sería, sin más, arrebatarles la posibilidad de que alguna vez vuelvan por ellas, decidió guardarlas en ese recipiente, a la espera de un arrepentimiento o una vuelta de tuerca o la nada misma. le explica (como luego reafirma cuando, más adelante, aparece cat power quien, entendemos, personifica a una ex pareja de él) que las puertas tienen que estar abiertas siempre. juan baez nudelman dice en un poema que (parafraseo) de estas cosas, la vida, no saca fotos, "así no te enterás de nada". hace ya más de dos años que mi facebook es absolutamente público, es decir: todo lo que acá digo o publico lo ven todos. no hace falta que seamos amigos. ni siquiera que el otro tenga una cuenta activa. me repito que es una postura ideológica, algo así como una política de mí misma hacia con las redes sociales. así también con el resto: twitter, instagram, blogspot, en fin. sin embargo, es curioso como no todo lo tengo enlazado. digo: elijo qué y dónde. me puedo repetir, también, que más o menos está todo pensado, que elijo, en efecto, ese qué y ese dónde, a veces por cuestiones estéticas, otras de formato, y otras directamente pensando en el público que las va a recibir. me digo a mí misma, parafraseando a una persona que quise mucho, que estoy "haciendo obra" (si mala o buena no sé y no importa, no es el punto). que los "archivistas del futuro" ya sabrán qué hacer con ella. me repito, sí. pero adentro mío también sé otra cosa: "mi vida no es como en instagram", y sin embargo ahí están, todas esas fotos del acá & ahora gracias a las cuales él se entera de todo. "un blog no es una persona" (pero yo sé que me leés). todas las miguitas que dejo para que puedas volver, todos los rastros-flori, las llaves adentro de un frasco que todavía no puedo tirar. no sé, quizás sea el otoño que agoniza, o el sol tremendo entrando por mi ventana, o silvio sonando de fondo hace varias horas, no sé. quizás sí sea hoy el día de cerrar todas esas puertas. y que el pasado se apile y se lo arroje, finalmente, a donde pertenece. no sé.